La lucha libre olímpica o lucha olímpica es un deporte en el cual cada participante intenta derrotar a su oponente con el uso de llaves y técnicas de proyección. El objetivo consiste en ganar el combate haciendo caer al oponente al suelo y manteniendo ambos omóplatos del rival fijos sobre el tapiz, el tiempo suficiente para que el árbitro se cerciore de esto, o ganando por puntuación mediante la valoración de las técnicas y acciones conseguidas sobre el adversario.

El término «libre» que denomina la modalidad se refiere a que, a diferencia de la lucha grecorromana donde no se pueden utilizar activamente las piernas ni atacar las del rival, en la lucha libre las piernas son un elemento más del ataque y la defensa.

Historicamente Olímpicos

Aunque la lucha Olimpica procede de los juegos Olímpicos que se celebraban en la antigua Grecia, cuando rehicieron su aparición en la era moderna en 1896, se consideró importante que la lucha fuera incluida desde un punto de vista histórico, de tal forma que se volvió uno de los elementos centrales de los Juegos. La lucha grecorromana se percibía como la verdadera reencarnación de la lucha griega y la lucha romana de la Antigüedad, y fue la que estuvo presente en la primera olimpiada.

La lucha libre se admitió en los Juegos Olímpicos en la sesión del COI celebrada en París en 1901.

Beneficios de practicar la Lucha Libre Olímpica

Este deporte es ideal para los niños y niñas que se encuentran en etapas de crecimiento y desarrollo, ofreciendo la oportunidad de mejorar su fuerza, flexibilidad y coordinación.

A diferencia de la mayoría de deportes que desarrollan grupos musculares específicos, como puede ser el caso del fútbol o atletismo en el que se desarrollan más las piernas que los brazos, los expertos coinciden en que en la lucha olímpica se realiza un desarrollo equilibrado de todos los grupos musculares, evitando de esta manera el riesgo de lesiones.

La natación, la gimnasia olímpica y la lucha Olímpica son de los pocos deportes en los que se desarrollan TODOS los músculos del cuerpo.

Además, en la Lucha Olímpica los niños y niñas, de cualquier edad desarrollan habilidades tácticas, estratégicas y competitivas, que luego podrán extrapolar a otros campos de su vida.

La lucha olímpica mejora el equilibrio, la velocidad y la agilidad, con ejercicios que hacen trabajar a los grupos musculares de la cadera, piernas, torso, parte superior del cuerpo, cuellos y la fuerza en las manos.

Pero en la lucha olímpica, no solo se desarrolla el cuerpo físico, también es un deporte que aumenta la autoestima, ayuda a quemar grasa y a construir el carácter de la persona.